martes, 19 de julio de 2011

Gata


Se encontró ronroneando a medianoche por las calles más oscuras.
“No queda espera”, se decía para sí.
Hora tras otra, en la calle, podía escuchar a los demás.

Se cruzó con esa mirada felina, mágica por momentos.
Gata. Con esos ojos asilvestrados, seductores.
Se acercó a ella. Afilaron bien las uñas.

Casi al alba, ronroneaban juntos por las calles más oscuras.
“¿Quién provoca a quién?”, se decían entre los dos.
Otra mirada furtiva, en la calle, sin importarles los demás.

Y, de repente, desapareció. Y, con ella, la noche.
Buenos días, gata. 


1 comentario:

  1. jajajajaja a shakira?? vaya!! nunca me habian sacado un paracido tan way :)

    yo tampoco entiendo mis miedos, y se que tienes razon en lo de arruesgarse pero... y si despues no sale bien, no podria ver como se marcha de mi vida me pondria muy triste y me partiria el corazon.

    tambien has empezado algo!!? entonces ha sido un verano muy especial para los dos!

    ResponderEliminar